No todos tuvimos la dicha de que en nuestra ninez, se nos tratara con respeto y con amor. Algunos crecimos en hogares, donde las muestras de afecto, eran acciones normales. Sin embargo, no todos las personas, pueden decir lo mismo. Otros, no escucharon nunca de los labios de sus progenitores y familiares, una palabra carinosa, una palabra de afirmacion, un abrazo, o un beso. Es mas, es alto el porcentaje de personas que fueron abusadas, cuando eran apenas unos ninos y llevan herido el corazon.
Naturalmente, cuando se ha vivido experiencias como estas en la ninez, en donde hubo carencia de afecto, de palabras amorosas, e incluso hubo maltrato, probablemente, el individuo afectado, seguira el mismo patron de conducta, con sus seres cercanos, debido a que se siente incapacitado a dar lo que no recibio, y es alta la posibilidad, de que como esta herido, hiera.
Es mas comun de lo que imaginamos, que las personas que experimentaron indiferencia, quebranto y dolor, en su pasado, sientan verguenza, de exteriorizar sus sentimientos, y prefieren quedarse callados, aun cuando desean actuar de otra forma. Como no fueron expresivos con ellos en su ninez, y como fueron humillados, luego, de adultos, tendran un conflicto serio, al momento de relacionarse con su pareja, o con sus hijos, y aun cuando los ame, se le dificultara manifestarles su amor.
Que agradable y cuanto bien hace cuando vemos a los padres abrazar carinosamente a sus hijos o viceversa. Ver la consideracion y el respeto con que se tratan, aun, cuando ya estan adultos hace mucho bien. Es una lastima, que por alguna razon, llega un momento en que esas manifestaciones desaparecen. Algunos piensan que porque sus hijos crecieron, ya no necesitan expresiones de afecto, otros se averguenzan de expresarlas. No deberia ser asi, porque aunque el cuerpo cambie, y nos convirtamos en adultos, nuestra alma, sigue necesitando carino y afecto.
Debemos romper esos patrones de conducta aprendidos, que nos roban momentos especiales y sanadores. Todos podemos reaprender y rescatar aquellas cosas que son vitales para construir relaciones cercanas y sanas. No tenemos porque continuar las conductas equivocadas de aquellos que nos lastimaron, sino que podemos cambiar la historia de la vida de los que son nuestra inmediata responsabilidad, ofreciendoles un amor expresivo, que afirme, y valide sus vidas.
Aun cuando fuimos heridos en la ninez, y privados de un beso o una caricia, podemos ofrecer algo diferente a los demas, es cuestion de decidirlo y actuar. Aunque las personas significativas para nosotros nos hayan fallado y causado heridas, Jesucristo es capaz de restaurar y sanar nuestro corazon. Acerquemosnos a Dios confiadamente, que como Buen Padre y amigo, hara cosa nueva en nosotros y nos permitira vivir una vida plena. Permitirle a El hacerlo, sera bendicion, tanto para nosotros, como para los que amamos.
Hoy puedes iniciar un cambio en tu vida; busca al Senor primero, y ofrece lo que te hizo falta y se te nego, y aunque hayas sido herido, conviertete en sanador. Evita que los que amas, crezcan con un vacio en su corazon. No solo ames a tus seres queridos, asegurate de que ellos lo sepan, lo escuchen y tambien lo sientan, de la manera en que lo necesitan.
Haz tu la diferencia, cambia tu historia, y la de los que amas, ofreciendoles tu amor !
Haz tu la diferencia, cambia tu historia, y la de los que amas, ofreciendoles tu amor !
"Oh
SEÑOR, Dios mío, a ti pedí auxilio y me sanaste." Salmo 30:2
DALE COLOR A TU VIDA !
Reflexiones que nutren el ser interior.
Por: Ingeborg Bernhard
