Cada dia es un regalo de Dios, y el abrir los ojos y respirar son las primeras cosas en el dia que nos pueden dar testimonio de esto. Los regalos se aprecian, se agradecen y se cuidan, y la vida es una oportunidad. Nuestro dia puede ser tan bueno como nos lo propongamos y esto no depende de lo que sucede en nuestro alrededor, sino que es una decision del corazon.
He aprendido que en uno esta el poder de hacer las cosas bien, en edificar nuestras vidas, en pintarla de colores, en optar por lo bueno, en ser agradecidos. Efectivamente tendremos dificultades, llegaran los dias en los que el dolor toque en nuestras puertas, nos desgarre el corazon y nos produzca un vacio que pareciera no tener fondo ni fin, pero en nosotros esta la manera de canalizar esos dolores y en superar el quebranto.
Definitivamente solos no podremos hacerlo, necesitaremos una porcion doble de fortaleza y la seguridad de que hay alguien superior a nuestras fuerzas, que nos puede sostener en sus manos para que en el encontremos consuelo y descanso.
Se por experiencia que si en nuestro corazon abunda la Palabra de Dios y Jesus ocupa su lugar en el, seremos personas valientes, fortalecidas y maduras para soportar la prueba y aceptar los hechos que no se pueden cambiar.
A veces es dificil entender la fortaleza, pues los que no conocen su fuente, pueden tacharnos de insensibles e indiferentes, pero que es la fortaleza sino, la virtud que confiere valor para soportar la adversidad y resistir los peligros, la fuerza fisica y moral para afrontar situaciones difíciles, y el recinto protegido con murallas o construcciones de defensa para resguardarse de los enemigos, aquellos que quieren angustiarnos, desesperarnos, atemorizarnos y causarnos una herida de muerte de la que no nos levantemos jamas.
Es mejor estar preparados antes que estos enemigos irrumpan en nuestras vidas sin compasion, es mejor contar con Dios que es el protector eterno, porque aun cuando nos toque llorar por un rato, protegera nuestras vidas y usara los quebrantos para hacernos mas fuertes y mejores.
Lo que leemos en el Salmo 46:1-3 es poderoso y real: " Dios es nuestro amparo y nuestra fortaleza, nuestra ayuda segura en momentos de angustia. Por eso, no temeremos aunque se desmorone la tierra y las montañas se hundan en el fondo del mar; aunque rujan y se encrespen sus aguas y ante su furia retiemblen los montes."
No se cual sea tu angustia o tu dolor, pero si se que lo que anota Nehemias 8:10 "No estén tristes, pues el gozo del Señor es nuestra fortaleza", es una verdad que debemos vivir cada dia.
Preparate para el dia malo, que cuando te visite el dolor, te encuentre tan listo, que el gozo de Dios en ti sea mayor que la tristeza que se presente.
DALE COLOR A TU VIDA!
Reflexiones que nutren el ser interior\
Por: Ingeborg Bernhard
