Siempre nos reímos, cualquier
cosa es un pretexto para alegrarnos y disfrutar de la vida!
Mi esposo y yo le damos un lugar
muy importante a la amistad dentro de nuestra relación, y la risa es un
elemento que nunca falta en nuestras conversaciones y actividades que
realizamos.
Que diferente es enfrentar la
vida y sus retos cuando nos sentimos alegres, cuando podemos ver el lado bueno
de las cosas y cuando juntos buscamos las soluciones que necesitamos. La razón
por la que mi compañero de vida y yo reímos, es porque como buenos amigos que
somos siempre encontramos un motivo para agradecer a Dios y para gozarnos.
La verdad que la alegría no tiene
que ver con cuanto poseemos, sino que depende de cuan agradecidos estemos con
lo que tenemos. Nosotros sabemos bien a que sabe la dificultad, de que color se
viste la soledad y como se presenta el rechazo. Entendemos lo doloroso que se
vuelve la vida cuando somos juzgados duramente, cuando no hay provisión o
cuando los amigos y la familia se alejan, pero también hemos descubierto que no
importando lo que pase a nuestro alrededor, mientras haya vida hay esperanza y
mucho por lo que estar agradecidos y contentos.
Damos gracias a Dios cuando
tenemos y cuando no tenemos porque la alegría no depende de las cosas sino del
Dador de ellas. Si lo tenemos a El, confiamos en que los momentos de adversidad
así como vienen se van, no duran toda la vida y es mejor vivirlos confiados sin
perder la paz ni la armonía que vivirlos sumando a la dificultad el mal humor y
la tristeza.
¿En que cambia la adversidad si
te vuelves malhumorado? No cambia en nada, sigue estando ahí y el enojo y la
amargura no traen solución y te incomodan. Es mejor conservar la paz, el buen carácter
y la alegría, porque no se si sabes que el aparato nervioso genera muchas
enfermedades emocionales cuando esta sometido al mal humor y al exceso de preocupación.
Toma nuestro consejo; es mejor reír, lo que requiere solo el deseo de hacerlo y
15 músculos que se activan a tu favor.
"Gocémonos y alegrémonos y
démosle gloria" Apocalipsis 19:7a
"Aclamad á Dios con alegría,
toda la tierra" Salmos 66:1
Deja a un lado el malhumor, y
decide reír y alegrarte porque el buen animo constituye buen remedio.
DALE COLOR A TU VIDA!
Reflexiones que nutren el ser interior
Por: Ingeborg Bernhard
