Translate Into Another Language

Wednesday, August 15, 2012

EL TIEMPO QUE SE VA NO SE RECUPERA JAMAS






Con frecuencia recordamos cuando éramos niños, las cosas que hacíamos, nuestros amigos, los juegos, las risas y los sueños que teníamos. Entonces queríamos que el tiempo pasara para poder tener independencia, algunos queríamos volar de casa para vivir solos, tener un apartamento, un trabajo, y dinero. El tiempo ha pasado y ahora añoramos muchas veces esos días felices de nuestra juventud, en la que nuestra preocupación era únicamente estudiar para que cuando fuésemos adultos tuviéramos un futuro prometedor.



Es fácil sorprendernos cuando vemos a los hijos de nuestros amigos pues dejaron de ser niños y ahora son hermosos adolescentes y nos damos cuenta de que el tiempo paso, para algunos la juventud se fue, y ahora las circunstancias cambiaron, las responsabilidades aumentaron y ya no son nuestros padres los que se preocupan por proveernos a nosotros, sino que somos nosotros los que tenemos que velar por ellos.



A veces quisiéramos que el tiempo retrocediera para hacer algunas cosas de diferente manera, sabemos que hubo mucho que pudiésemos haber hecho mejor, quizás sentimos nostalgia porque entendemos que el tiempo se ha ido y no podremos recuperarlo jamás. Antes quizás queríamos tener mucho, ser exitosos o famosos, pero en ese afán se nos escaparon los detalles realmente importantes de la vida por los cuales ahora estuviésemos dispuestos a pagar el precio que fuese con tal de poderlos vivir.



Lo pasado no podemos cambiarlo, pero aun podemos aprender a valorar nuestro tiempo, pues mientras tengamos vida, podemos también cambiar nuestros hábitos. No pospongas lo que es importante hacer ahora,  algunos asuntos no pueden esperar mas, de la resolución de ellos depende tu felicidad. Relaciones que se han enfriado y que son importantes es necesario fortalecerlas. A veces incurrimos en deudas, no necesariamente monetarias tales como falta de perdón, estas debemos solucionarlas porque el hacerlo nos traerá paz.



El tiempo que Dios nos conceda a partir de hoy, debemos invertirlo bien, en lugar de acumular bienes y dinero, cosas que al final se quedaran, es mejor limpiar nuestros corazones, sacando todo lo que nos causa cansancio para llenarlo de aquello que nos haga bien. Disfruta tu vida, deja la amargura, se agradecido, aprende a dar, perdona, ama a los tuyos, dedícales momentos buenos e inolvidables, que ellos conozcan lo mejor que hay en ti y sobre todo ora, lee la palabra y conoce mas de cerca a Dios.




Recuerda lo que nos recomienda Colosenses 4:5  “Andad sabiamente para con los de afuera, aprovechando bien el tiempo.





DALE COLOR A TU VIDA

Reflexiones que nutren el ser interior

Por: Ingeborg Bernhard