Los pensamientos que Dios tiene para con
nosotros siempre han sido buenos, y nosotros lo sabemos pues de El solamente
hemos recibido sorpresas agradables, milagros, bendiciones y todo esto lleno de
amor. Él debe disfrutar más que nosotros ese momento de la sorpresa, en el que
no podemos creer lo que nos está sucediendo porque es grande, tan grande que
nos preguntamos ¿será verdad lo que estoy viviendo?
Pues déjame decirte algo, todos los días nos
podría pasar algo maravilloso si nosotros aprendiéramos a discernir las cosas
que Él nos presenta a diario para que las tomemos y las disfrutemos, pero
sucede que andamos por el mundo caminando a veces como “Zombis” como si anduviésemos
a ciegas y no vemos más que a donde nos
apunta la nariz.
Si sabemos que los pensamientos de Dios
son buenos y sus misericordias nuevas cada día, entonces sabemos tambien, que esos
pensamientos son para nosotros y esas bendiciones y misericordias fueron
creadas para que las disfrutáramos, no para que se echaran a perder, para que
se desperdicien, se ignoren o pasen desapercibidas. Lo que me dice esto es que
debemos estar muy atentos porque hay órdenes puestas a favor nuestro, que
tienen una envoltura hermosa, pero una tarjeta con nuestro nombre. Hay regalos
que no son para nuestros vecinos sino para nosotros y no los tomamos porque nos
acostumbramos a estar conformes con lo que tenemos o imaginamos.
Haz lo que Dios te mande a hacer; no
dudes jamás en hacerlo, porque cuando Él te lo pide, es porque sabe que te
conviene y que detrás de tu esfuerzo y tu actitud de obediencia viene una gran bendición.
No ignores la voz de Dios cuando te susurra al oído algo, porque todo lo que
sale de Él es para tu bien. Puede parecerte locura lo que Él te pide, pueden reírse
de ti los que no entienden que Dios no es un Dios cuadrado ni tiene parámetros,
ni lo encasilla lo que el hombre toma por normal, pues Él no tiene que ser lógico
para hacer grandes cosas y cumplir grandes sueños, pues la logica se sujeta a Él.
Cuando cumplimos con lo que nos manda a
hacer, probablemente por un tiempo pensaremos que son locuras nuestras, que
perdemos el tiempo, que desaprovechamos las horas de sueño, y puede ser también
que sientas que te has tirado al fondo de un pozo que no sabes si tendrá fin.
Esos pensamientos pueden pasar por nuestra cabeza, porque estamos acostumbrados
a los límites a lo tangible a lo material. Sin embargo, Dios no escucha al tiempo que quiere
apresurarlo o detenerlo, ni al día ni a la noche que quieren decirle que es hora de
descansar.
¿Quién puede limitar a Dios cuando se propone algo? ¿El que no veas las cosas materializadas aun? ¿El
que no tengas los recursos que crees que necesitaras? ¿El que no tengas un
nombre importante que te abra puertas? Dios se ríe de eso porque cuando llega
la fecha que el fijo para darnos algo, en medio de la catástrofe o en medio de
grandes eventos lo dará, pues no hay bóveda del cielo, ni inmensidad de mar, ni
profundidad de las aguas, ni anchura de tierra que pueda evitar que Dios te
bendiga cuando Él ya lo ha dispuesto y ha puesto fecha a tu bendición.
Hoy mi corazón se regocija más que
cualquier otro día particular, porque una linda aventura que comencé con Él,
por El y para Él está llegando al punto que Él quiere, todo se ve más claro,
todo tiene más sentido, todo está tomando la forma necesaria, pero esa es la
parte de Él. Él sabe que mi parte la hice, no sola, pero con su ayuda, y ahora
viene la satisfacción de haberle obedecido. No pienso en el futuro, porque del
futuro se encarga El. Pienso en el presente, pienso en que quiero estar atenta,
escucharle, hacer lo que me pida que haga, obedecerle y gozarme porque si lo
hago, no sé lo que me espera, pero sé que es bueno y mejor de lo que puedo
imaginar.
LA OBEDIENCIA TRAE BENDICION.
Deuteronomio 28: 1-2
“Acontecerá que si oyeres la voz de Jehová tu Dios, para guardar y poner por obra todos sus mandamientos que yo te prescribo hoy, también Jehová tu Dios te exaltará sobre todas las naciones de la tierra. Y vendrán sobre ti todas estas bendiciones y te alcanzarán, si oyeres la voz de Jehová tu Dios.”
“Acontecerá que si oyeres la voz de Jehová tu Dios, para guardar y poner por obra todos sus mandamientos que yo te prescribo hoy, también Jehová tu Dios te exaltará sobre todas las naciones de la tierra. Y vendrán sobre ti todas estas bendiciones y te alcanzarán, si oyeres la voz de Jehová tu Dios.”
OBEDIENCIA TRAE EL TESORO DE DIOS ABIERTO. Deuteronomio 28: 12
“Te abrirá Jehová su buen tesoro, el cielo, para enviar la lluvia a tu tierra en su tiempo, y para bendecir toda obra de tus manos y prestarás a muchas naciones y tú no pedirás prestado.”
DIOS TE BENDICIRA CON ALEGRIA. Proverbios 10: 22
“La bendición de Jehová es la que enriquece, y no añade tristeza con ella.”
Obedece porque hay promesa en esto; Sus
bendiciones te alcanzaran, más pronto de lo que imaginas.
DALE COLOR A TU VIDA
Reflexiones que nutren el ser interior
Por: Ingeborg Bernhard