Todo lo nuevo en nuestras vidas es una oportunidad para aprender e incursionar en aventuras nunca antes vividas. El comienzo de una nueva etapa, un nuevo año, un nuevo trabajo, nuevas relaciones, nuevo periodo de estudios, todo esto nos expone a nuevas experiencias que enriquecerán nuestras vidas.
No debemos tener temor a lo nuevo de Dios para nosotros, pues viniendo de
El indudablemente es bueno, porque El solo sabe dar buenas dadivas a los que
ama. Pienso en alguien muy cercano a mi quien esta muy contenta con su trabajo
en el cual labora desde hace unos 6 años aproximadamente. Nunca la oí quejarse
por nada y cada día se levanto con alegría a cumplir con su responsabilidad con
la mejor disposición de su parte. Sin embargo, cuando menos lo esperaba le
comunican que la compañía se moverá para una pequeña ciudad al Norte, a unas 3
o 4 horas de donde ella ha vivido los últimos 19 años de su vida y en donde
tiene su familia y todos sus intereses. Indiscutiblemente una noticia como esta
cae como un balde de agua fría porque requerirá tomar una decisión seria de
irse con la compañía lejos de su hogar para estar sola, o quedarse y buscar
otro empleo.
Es aquí cuando deben ponerse en la balanza todas las cosas; es cierto que
la compañía es excelente y ella ha estado contenta y cómoda trabajando ahí,
pero también es cierto que por buena que sea, siempre la vida y Dios puede
abrir puertas mejores con nuevas oportunidades en donde su experiencia sea
valorada y sus conocimientos sean extendidos. Tendrá que correr ciertos riesgos
sea cual sea la decisión ella tome, pero mientras tenga confianza en Dios y
ponga sus planes en sus manos, tiene la seguridad de que en la etapa de transición,
Dios estará con ella.
Puede ser que hasta ahora nos haya ido bien y estemos satisfechos con lo
que tenemos, pero siempre Dios querrá darnos algo nuevo y fresco en donde
podamos crecer, aprender y ser mejores, por lo tanto no tengamos miedo a lo
nuevo, porque son los que se arriesgan los que logran sus metas y sueños.
Cada día tenemos oportunidad de aprender, y no debemos conformarnos ni
dejar de sonar, porque Dios no tiene límites y siempre nos querrá llevar a
cosas más grandes.
Cuando sientas que lo que representa tu seguridad esta en peligro o
tambalea, no tengas miedo, es posible que Dios este cerrando puertas para
llevarte a lugares mas grandes, los cuales no alcanzarías sin El.
Déjalo que te guie y te dirija, mientras crees y confías en que nunca
te dejara solo porque, si has sido buen mayordomo de lo que hasta ahora te dio,
seguramente te dara mas.
"Ensancha el sitio de tu tienda, y las cortinas de tus habitaciones
sean extendidas; no seas escasa; alarga tus cuerdas, y refuerza tus
estacas." Isaias 54:2
DALE COLOR A TU VIDA!
Reflexiones que nutren el ser interior
Por: Ingeborg Bernhard
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